António Guterres, secretario general de la Organización de las Naciones Unidas lamentó profundamente la muerte de, por lo menos, 38 personas en el incendio ocurrido en un centro migratorio del Instituto Nacional de Migración en Ciudad de Juárez, Chihuahua. Además, instó a que se realice una investigación exhaustiva sobre lo ocurrido.

Por otro lado, la ONU México, a través de un comunicado, expresó su solidaridad y sus profundas condolencias a las familias y amigos de los migrantes fallecidos la noche del pasado lunes.

Naciones Unidas resaltó los compromisos internacionales sobre la migración y asilo en los cuales participa México, en especial, el Objetivo 13 del Pacto Mundial para las Migración Segura, Ordenada y Regular que llama a garantizar que “cualquier detención en el contexto de la migración internacional cumpla las garantías procesales, no sea arbitraria, se base en la ley, la necesidad, la proporcionalidad y la evaluación individual; esté a cargo de funcionarios autorizados y dure lo menos posible”.

Piden legislación

En un posicionamiento, que englobó a más de 200 organizaciones de la sociedad civil organizada y defensores de derechos humanos, se solicitó al Gobierno federal que, debido al incendio que provocó la muerte de las personas migrantes, se destituya a Francisco Garduño Yáñez, como comisionado del INM.

Por otro lado, pidieron que se adelante el proceso de identificación y entrega digna de los restos de los fallecidos a las familias, se asuman los costos de repatriación de cuerpos, investigar los hechos ocurridos para identificar a los funcionarios responsables y que no haya impunidad.

Mientras que, al INM, las organizaciones le exigieron responsabilizarse y explicar lo que sucedió.

Mientras que al Congreso de la Unión, le solicitaron legislar por la excepcionalidad de la detención por razones migratorias y avanzar hacia su erradicación; eliminar eufemismos como “presentación” y “alojamiento” de la Ley de Migración, entre otras acciones más.